El crecimiento de la extensión de las ciudades, la necesidad de proveer de una extensa red de servicios, o la aparición de nuevas tecnologías y necesidades ciudadanas, hace que se requiera la evolución de la red eléctrica tradicional hacia un modelo de Red Inteligente o Smart Grid, tal y como se puede concluir del vídeo publicado por Endesa Educa.
¿Cuáles son los beneficios de este tipo de red eléctrica frente a la red tradicional? Esta innovadora tipología de red fomenta aspectos como la integración de renovables de pequeño y medio tamaño y la gestión de las conexiones y desconexiones de vehículos eléctricos, entre otros. Además, también puede dar respuesta a problemas técnicos deslocalizados de forma ágil, con un menor impacto para los usuarios, haciendo posibles los intercambios bidireccionales de energía.
La integración en la red de todos estos factores permitiría una mejora de la eficiencia a nivel global, facilitaría la penetración e integración de renovables deslocalizadas, además de un incremento del ahorro energético. Como consecuencia de ello, se produciría un cambio de modelo de gestión de la red, al pasar de una gestión estática y unidireccional, a una más dinámica y capaz de operar los flujos de electricidad en ambas direcciones.