En agosto de 2015, la Agencia Internacional de la Energía (IEA) publicó el estudio anual Electricity Information, con el objetivo de aportar la información necesaria para el análisis de la situación de mercado del sector eléctrico y de las políticas vigentes en los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). En base a sus conclusiones, la IEA ha elaborado el informe Key Electricity Trends que resume los mensajes más relevantes del mencionado estudio, haciendo hincapié en las principales tendencias del sistema eléctrico en términos de producción, capacidad, consumo, interconexiones y precios.
En primer lugar, se indica que en el año 2014 la producción bruta de energía eléctrica en los países de la OCDE ha caído un 0,8% respecto al año anterior, afectando, especialmente, dicha reducción a las tecnologías de generación a partir de fuentes fósiles. Si bien aún no se dispone de los datos de producción 2014 en los países no pertenecientes a la OCDE, la tendencia de los últimos años apunta a un crecimiento muy superior al del resto de países.
De acuerdo a los últimos datos disponibles, se indica que en el año 2013, el 59,8% de la producción de electricidad en países de la OCDE se generó a partir de combustibles fósiles, el 13,6% fue proporcionado por las plantas hidroeléctricas, 18,1% en centrales nucleares, el 5,7 % se generó a partir de fuentes solares, eólicas y geotérmicas y un 2,9 de biocombustibles y residuos. En el caso de países no pertenecientes a la OCDE el 73,8% de la producción de electricidad se generó a partir de combustibles fósiles, el 19,1% se generó en plantas hidroeléctricas, 4,1% en centrales nucleares, el 2,0 % se generó a partir de fuentes solares, eólicas y geotérmicas y un 1,2% provino de biocombustible y desperdicios.
Respecto a los datos de capacidad instalada, en 2013 los países de la OCDE reportaron 2.794 GW, representando un aumento del 0,8% respecto al 2012. La energía solar fotovoltaica y la eólica han sido las principales contribuidoras a este incremento. El informe destaca que este crecimiento está disminuyendo progresivamente y se encuentra ya lejos del alcanzado en el periodo 1974-1990 que alcanzaba un incremento promedio del 3,5%. La causa principal de esta desaceleración es el desarrollo de industrias menos intensivas en energía en los últimos años.
Por otra parte, el informe pone de manifiesto que en 2013 el incremento del consumo de electricidad de la OCDE (0,6%) fue inferior al de los países no miembros (5,8%). Además, recuerda que la interconexión de redes eléctricas entre países es una práctica cada vez más extendida. Así, desde 1973 las importaciones y exportaciones de electricidad en la OCDE aumentaron a una media anual del 4,2% y 4,4% respectivamente.
Por último, el informe termina indicando que en 2014 el precio medio de la electricidad en la OCDE se incrementó en un 1,9 % en términos reales respecto al año anterior, aumentando los precios industriales en un 2,2 % y el de los hogares en un 1,6%.